La incidencia del coronavirus se mantiene estable en España e incluso está dando señales de "ir más despacio" que en las últimas semanas, pese al incremento diario de casos, que este jueves rozan los 9.000 nuevos, la mayoría de ellos detectados una vez más en Madrid.
Así lo ha manifestado el director del Centro de Coordinación de Alertas y Emergencias Sanitarias, Fernando Simón, en rueda de prensa en la que ha destacado que "seguimos teniendo unas cifras de incidencia en 14 días de 212 (por cada 100.000 habitantes), de los que un 30% se concentran en Madrid".
Reducción de rebrotes con respecto a semanas anteriores
Sanidad ha registrado 191 fallecidos con fecha de defunción en los últimos 7 días, de los que 73 corresponden a Madrid que suma ya 8.692 muertos.
En las últimas 24 horas, 1.077 enfermos con covid han sido hospitalizados, aunque otros 810 han recibido el alta; así, la tasa de camas ocupadas por estos pacientes, que ascienden hasta las 15:30 horas de hoy a 7.194, se mantiene en el 6 %.
Según ha explicado Simón, en la última semana se han notificado 589 brotes, con un total de 3.709 casos, lo que supone una reducción respecto a fechas anteriores, y que eleva la cifra total a 3.061 brotes para 21.500 casos.
También ha dicho que "se va controlando el impacto de los brotes, ya que ahora hay 7 casos relacionados con cada uno, frente a los 10 de fechas anteriores", y ha destacado la repercusión de las restricciones en el ocio nocturno en la disminución de contagios.
Preocupación por rebrotes en residencias de mayores
Sin embargo, ha expresado su preocupación por el aumento de los brotes en los centros sociosanitarios, por su vulnerabilidad, y ha cifrado en 364 los casos importados en 276 vuelos, que han generado 1.859 contactos con seguimiento.
Ante esta situación, el ministro de Sanidad, Salvador Illa, ha reiterado que ve en estos momentos innecesario un confinamiento generalizado como el que se produjo en marzo y que tampoco considera viable un "confinamiento perimetral" de Madrid por el aumento de los contagios, mientras ha insistido en que "se está haciendo un buen trabajo" en todas las comunidades.
Al ser preguntado por estas manifestaciones, Simón ha señalado que, "si Illa lo ha dicho, no soy quién" para enmendarlo y también se ha mostrado convencido de que "la situación no requiere confinamiento" y ha apuntado a la adopción de otras medidas para frenar los contagios.
Medidas que la Comunidad de Madrid va a anunciar este viernes, como restricciones de aforo, aumento de rastreadores, refuerzo del transporte público, más pruebas serológicas o volver a habilitar hoteles medicalizados.
Una de las comunidades que ha logrado contener el avance de la pandemia ha sido Aragón que, tras las restricciones aplicadas por los rebrotes en la Comarca Central y la ciudad de Zaragoza, entre otros, pasará mañana a la "nueva normalidad" en todo su territorio al conseguir una curva de contagios descendente y una estabilidad en la pandemia.
Para Simón este hecho es una "muy buena noticia" y ha felicitado a las autoridades aragonesas por haber conseguido, hasta ahora, la reducción de los contagios, aunque, ha subrayado que "queda mucho y eso no implica que podemos relajarnos".
Virulencia en el contagio comunitario
También hay avances en la evolución de la pandemia en Cataluña, donde los datos de los últimos 4 días demuestran un "pequeño descenso" en la curva de contagios, según los responsables sanitarios que han valorado que las restricciones aplicadas en algunas zonas "tienen un claro impacto" a la hora de reducir los contagios pero deben ser "un último recurso".
Sin embargo, la virulencia del contagio comunitario ha llevado a la Junta de Castilla y León a imponer medidas restrictivas en los municipios de Valladolid y Salamanca, avaladas por la Justicia y en vigor desde este jueves, que han sido asumidas por la población entre la resignación y la queja.
Por su parte, Castilla-La Mancha ha decretado el confinamiento de Bolaños de Calatrava (Ciudad Real) ante el aumento de casos de COVID-19 en los últimos días, con lo que se convierte en la segunda localidad de Castilla-La Mancha en aplicar medidas más restrictivas, tras el municipio albaceteño de Villamalea (Albacete).
