El deporte ha sido, sin ninguna duda, uno de los sectores más golpeados por la pandemia del coronavirus, no solo en lo que a competiciones oficiales se refiere, sino a todo lo que engloba un negocio como este.
Los derechos televisivos, una de las principales fuentes de financiación del mundo del deporte, se han visto obligados a cancelar los contratos y, por ende, a dejar de ingresar beneficios.
La hemeroteca como primera opción
Ante la imperiosa necesidad de las televisiones, tanto públicas como privadas, de seguir emitiendo a pesar de que no haya deporte en directo, las cadenas televisivas han optado por tirar de hemeroteca.
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Como si de un recopilatorio de los mejores momentos deportivos del año se tratase, las TVs han adaptado toda su programación a los tiempos que corren, optando por retransmitir toda clase de eventos deportivos pasados, para entretener al público y, de paso, hacerle recordar esos partidos, esos eventos deportivos, que tantas alegrías y tristezas dieron en un pasado.
Futuro incierto
La hemeroteca de las televisiones tiene contenido suficiente para pasar mucho más de un mes de cuarentena, así que por ahí no viene el problema de las retransmisiones.
La duda de todos los canales televisivos es, a día de hoy, si habrá más deporte en lo que queda de 2020.
Muchas son las teorías y los rumores que dicen que el deporte volverá en verano progresivamente, pero no hay nada claro.
La feroz evolución de la pandemia, unida a la imposibilidad de realizar un evento deportivo que mueva a mucha gente por temor al contagio o a posibles rebrotes de la enfermedad, hace que el futuro cercano de las televisiones deportivas pinte muy negro.