El Centro para el Control y la Prevención de Enfermedades de Corea del Sur (KCDC, según sus siglas en inglés) ha informado este jueves del registro de 288 nuevos positivos, 276 de ellos de transmisión local.
Esto supone una semana seguida superando la barrera de las tres cifras y las autoridades alertan de que el brote de Seúl está cerca de estallar a nivel nacional, tras alcanzar 16.346 casos acumulados.
El país asiático ha registrado más de 1.500 nuevos casos desde la última semana, alcanzando cifras récord que no se recordaban desde hace cinco meses.
Rebrote en Seúl
Las autoridades sanitarias han advertido de que esta semana será clave para determinar si Corea del Sur se halla ante una nueva ola de coronavirus, según ha adelantado la agencia surcoreana de noticias Yonhap.
La mayoría de los casos de este último rebrote proceden del área metropolitana de Séul y están relacionadas con los contagios locales de una iglesia de la capital, cuyos feligreses, instigados por su pastor, celebraron el pasado fin de semana una manifestación en contra del Gobierno a la que acudieron millares de personas.
Ante ello, el primer ministro de Corea del Sur, Moon Jae In, anunció que tomaría "medidas enérgicas y severas" contra aquellos que hayan instigado esta concentración pues "ponen en claro riesgo las acciones llevadas a cabo para contener la pandemia".
El Gobierno ha prohibido las reuniones en espacios cerrados con aforos de más de 50 personas y los encuentros al aire libre de más de 100, mientras que también se ha decretado el cierre de las llamadas "instalaciones propensas al riesgo", como salas de karaoke, clubs nocturnos, cibercafés y bufés.
Hasta el momento, Corea del Sur ha registrado 16.346 casos acumulados, y ha confirmaod una muerte adicional en las últimas 24 horas relacionada con la COVID-19, por lo que son 307 las personas que no han logrado superar la enfermedad.
Por otro lado, la cifra de enfermos que han logrado ser dados de alta tras superar el nuevo coronavirus ha ascendido a 14.063, después de los últimos 57 pacientes que se han recuperado.