La crisis del coronavirus ha llevado a los autónomos a una situación límite en la mayoría de negocios, dado que el desamparo que sufren, con respecto a las ayudas sociales, se ha incrementado por las polémicas medidas del Gobierno entorno a las ayudas correspondientes a este sector.
Las ayudas de carácter social implementadas por el Gobierno para ayudar a los autónomos en situación de vulnerabilidad, obliga a presentar un documento expedido por la Agencia Tributaria que debe certificar el cierre del negocio.
De este modo, tal y como destaca la Federación Nacional de Asociaciones de Trabajadores Autónomos (ATA), el 95% de los autónomos españoles se quedarían fuera de las ayudas planteadas, debido a los siguientes motivos:
Cierre de negocio
Para poder acceder a las ayudas sociales, como la moratoria hipotecaria de locales o de viviendas particular, para las ayudas en los suministros, la suspensión de créditos e, incluso, para la recuperación del plan de pensiones, el Gobierno te está pidiendo la acreditación de la baja real, ordinaria y censal.
Es decir, que el autónomo haya cerrado su negocio
Las ayudas sociales excluyen al 95% de los autónomos
Si para acreditar la situación de vulnerabilidad económica se obliga a los autónomos a cerrar el negocio y certificarlo ante Hacienda, no pueden ser beneficiarios del cese de actividad extraordinaria ya que, en este caso continúan estando de alta en la Seguridad Social, es decir, sólo tienen "suspendida" la actividad y no han cerrado definitivamente.
Todavía está por ver si el Gobierno rectificará en este sentido y ampliará el abanico de ayudas para autónomos, ya que de no ser así, esta crisis afectará de manera muy grave a una parte muy importante de la economía de nuestro país.
Fuentes:
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