Sabemos que el coronavirus permanece en determinadas superficies. Puede durar horas o días en cristales, metales…pero, ¿Qué hay de las superficies de los objetos sintéticos?
El caucho de silicona es uno de los materiales empleados para la elaboración de lentes de contacto, un material en el que el COVID-19 podría durar hasta cinco días.
Usarlas o no, ¿Qué hacer?
Actualmente, no está demostrado que se deban dejar de utilizar lentillas para evitar el contagio. Según la Sociedad Española de Oftalmología, “no hay evidencias hasta la fecha de que las personas sanas deban evitar el uso de lentes de contacto”.
Pero sí señalan que las gotículas transmisoras del coronavirus pueden encontrarse en las lágrimas o en la membrana conjuntiva que cubre el ojo y provocar un contagio. Por eso, recomiendan que se dejen de usar durante la pandemia y se usen las gafas en la medida de lo posible.
En caso de que no sea posible, la Sociedad Española de Oftalmología aporta una serie de indicaciones.
- Lávate las manos, siguiendo las recomendaciones de la OMS, antes y después de ponerte o quitarte las lentillas.
- Es mejor usar las desechables diarias. En caso de que no lo sean:
- Lávate las manos
- Quítate las lentillas
- Lávalas y frótalas con el limpiador adecuado en función del tipo de lentilla
- Enjuaga las lentillas en una solución salina estéril
- Desinféctalas con peróxido de hidrógeno al 3% durante 6 horas en un contenedor adecuado para ello. Normalmente, puedes usar el kit de limpieza y desinfección habitual en el que se incluye todo lo necesario
- Úsala de nuevo una hora después de haber introducido la pastilla. Unas 7 horas después de habértelas quitado
- Enjuaga en la solución salina antes de ponerlas nuevamente
- Lávate las manos antes de colocarlas y después de hacerlo