La venta de bicicletas se ha disparado durante una “nueva normalidad” que, a pesar de la caída industrial provocada por el confinamiento, parece haber cambiado algunos hábitos de consumo beneficiando a sectores muy concretos, como el de los pedales o, también, la venta de muebles y la de electrodomésticos.
Aunque el contexto actual es muy volátil y se impone la cautela, no cabe duda de que algunos sectores están mejorando rápido. Y, entre los ganadores, la bicicleta, como en una etapa de la Vuelta, protagoniza una escapada en solitario sobre cualquier otro producto, como reconoce Carlos Núñez, secretario general de la Asociación de Marcas y Bicicletas de España (AMBE).
Las bicicletas se han convertido en 'Top ventas' durante la pandemia
“Cuando pasamos a la fase 0 y se abrieron las tiendas de bicicletas, en mayo, se empezaron a formar colas. En aquella primera semana del mes ya vimos un incremento del 400 %, tanto en las ventas como en las reparaciones de bicicletas. Y a partir de ahí, el incremento ha sido sostenido, en mayo, junio y julio. Ya en julio se empezaron a agotar los stocks de las más baratas. Y hasta después de agosto ha sido muy difícil comprar una bicicleta, ni siquiera en internet, porque además el fenómeno es mundial”, explica.
Núñez, que asocia el “boom” a dos factores, la búsqueda de alternativas al aire libre para hacer ejercicio y de medios de transporte distintos al metro o al autobús públicos, recuerda cómo “a partir de junio, desde las tiendas generalistas al comercio especializado empezaron a vender bicicletas de precios más altos. Y las entidades de crédito al consumo incrementaron el número de operaciones de financiación de compra de bicicletas”.
Un reciente informe del INE respalda las afirmaciones de Núñez: según recientes datos publicados por el Instituto Nacional de Estadística, entre las pocas actividades industriales de España que han incrementado su facturación respecto a julio de 2019 figura la fabricación de bicicletas (un 32,1 % de mejora de su rama industrial, en la que están incluidas también las motocicletas, los vehículos para personas con discapacidad y otro material de transporte).
En ese mismo informe del INE se señala también que, a pesar de que la cifra de negocios de la industria cayó un 10,6 % en julio respecto al mismo mes de 2019, la fabricación de electrodomésticos aumentó respecto a ese mismo mes un 7,8 %.
Los muebles mejoran sus ventas en España durante el confinamiento
También la industria del mueble ha mejorado las ventas en España, aunque ha sufrido la caída de las importaciones.
IKEA, que vende muebles y electrodomésticos, superó los 800.000 visitantes en la primera semana de apertura de sus centros tras el confinamiento, según sus datos. Poco más tarde, un estudio de Sigma Dos para esta empresa aportaba una explicación: un 43,7 % de los consumidores encuestados reconocía darle más importancia a su hogar tras el confinamiento.
Petra Axdorff, directora general de IKEA en España, lo explica así a Efe: "En nuestro caso, la tendencia de venta ha crecido en un 10 %, con un notable aumento de las ventas online”.
“Nuestra valoración sobre la reapertura de tiendas ha sido muy positiva”, añade antes de concretar que “la tendencia de visitantes ha crecido un 15 % con respecto a antes del confinamiento”, un fenómeno que asocia a que “el confinamiento ha puesto de relevancia la importancia del hogar”.
El deseo de “hacer más funcional el hogar" o cuidar los detalles parecen haber ganado espacio en la mente del consumidor. Un claro ejemplo han sido los artículos relacionados con el teletrabajo, cuyas ventas llegaron a multiplicarse hasta por cuatro, explica Axdorff.
La venta online como principal impulso
La misma percepción tiene, por ejemplo, Luis Peris, responsable de Ital Concept España, una agencia comercial de mobiliario y equipamientos con representantes en todo el país: “Las ventas en muebles para el hogar han subido en cuanto la gente ha podido volver a consumir tras el confinamiento. Con un 25 % menos de días hábiles para la venta en tiendas, el consumo solo ha caído en cifras de 10 o 15 %”, explica.
“La tendencia se vio pronto”, añade para apuntar: “Un detalle significativo que percibimos inmediatamente después del confinamiento fue que no nos anularon ningún pedido de los que teníamos acordados desde antes de marzo. Y esa tendencia ha continuado, en especial con productos como sofás, camas...".
Esto no significa exactamente que todo el sector del mueble viva un gran momento, porque las exportaciones de este producto no existieron durante el estado de alarma, provocando un descenso del 21,5 % en el primer semestre de 2020, según datos de la Asociación Nacional de Fabricantes y Exportadores de Muebles de España.
Incrementos importantes en el mercado de los electrodomésticos
El director general de ANFEL (Asociación Nacional de Fabricantes e Importadores de Electrodomésticos), Alberto Zapatero, reconoce por su parte “incrementos de mercado relevantes”, pero insiste en que la situación actual es tan volátil que no es posible extraer conclusiones sobre el futuro inmediato.
“A causa del cierre de marzo, y aunque vendimos algo por internet, en mayo la caída de ventas era del 27 %. En el verano nos hemos encontrado con un incremento del mercado y cuando cerramos agosto de 2020 la habíamos reducido a un 9 % sobre 2019 -explica-. Es posible que parte de esa mejora se deba a que hubiera una demanda latente en el confinamiento que luego se ha ejecutado. También puede haber otros componentes, como la voluntad de mejorar la comodidad en casa. Pero en un escenario como el actual, es imposible saber qué pasará”.