Uso mascarillas y aumento de casos asintomáticos: El uso de mascarillas es obligatorio en España desde mayo para proteger ante un posible contagio por coronavirus.
De ahí que el Ministerio de Sanidad recomiende las higiénicas o quirúrgicas, ya que sirven como barrera para evitar la dispersión vírica cuando la persona que la usa estornuda, tose o habla.
Un artículo publicado por The New England Journal of Medicine sugiere que las mascarillas tienen un papel mucho más importante en la lucha contra la COVID-19 ya que protegen también a los que las llevan.
Uso de la mascarilla como método de prevención
El texto apunta que su uso generalizado podría estar detrás del aumento del porcentaje de casos asintomáticos o con síntomas leves (al reducir la exposición al virus).
El artículo recoge varios ejemplos reales y presenta una hipótesis que podría resumirse en pocas palabras. Llevar mascarilla no protege (si el otro interlocutor no la lleva) pero sí reduce la exposición al virus ya que ejerce como una especie de barrera.
La cantidad de gotículas inhaladas es menor y de ahí que los casos de coronavirus sean más leves o incluso se presenten de forma asintomática.
El artículo de The England New Journal of Medicine se basa en múltiples experiencias.
En el mes de julio, los Centros para el Control y Prevención de Enfermedades de Estados Unidos (CDC) estimaron que la tasa de infección asintomática era del 40%, pero el dato supera el 80% en entornos en los que el uso de mascarillas es obligatorio.
La revista insiste en que es una hipótesis basada en la evidencia, pero se necesitan más estudios que comparen la tasa de infección asintomática en áreas con y sin mascarilla.
Por ahora los datos sugieren que usar mascarilla en toda la población puede beneficiar a ambos componentes de la respuesta.